Donante de riñón comparte su testimonio sobre su decisión que cambió vidas en el Hospital van Buren
***Centro asistencial destacó el caso que cobra especial relevancia en la conmemoración del Día del Trasplante, contabilizando 13 trasplantes y 6 procuramientos en lo que va del 2024.
En el Hospital Carlos van Buren de Valparaíso, se llevó a cabo un exitoso proceso de trasplante de riñón que marcó un antes y un después en la vida de Enzo Raggi Cabello y Danilo Villaseca Mori. Este emotivo testimonio permite conocer la experiencia de un donante vivo y el receptor del riñón, derribando mitos y compartiendo la realidad de este acto de amor y generosidad.
Enzo, como donante, reflexionó sobre el proceso que vivieron, desde la decisión de donar su riñón hasta la preparación para la cirugía. A pesar de los desafíos y dudas iniciales, Enzo se mantuvo firme en su decisión, demostró un profundo compromiso con la salud y bienestar de su pareja. Su valentía y generosidad fueron fundamentales para el éxito de este trasplante.
El Dr. Vicente Torres Cifuentes, jefe de la Unidad de Procura y Trasplante de Órganos y Tejidos del hospital, destacó la relevancia del caso. “El donante vivo es una política prioritaria a nivel mundial para los trasplantes renales, idealmente antes de que los pacientes ingresen a diálisis. Este tipo de trasplantes mejora significativamente la calidad y expectativa de vida del receptor”, explicó.
Decisión
Cuando Danilo le comentó a Enzo que existía la posibilidad de optar a un trasplante renal de donante vivo, Enzo inmediatamente le ofreció el suyo, “cuando él me comentó, yo automáticamente le dije, necesitas un donante, yo soy donante. Tengo mi carnet de donante. Lo había hecho el 89, en Curicó”, relató.
Por su parte, Danilo Villaseca Mori reconoció que el proceso desde el diagnóstico de sus problemas renales hasta el momento en que conversó con su pareja para el eventual trasplante renal donante vivo fue complejo, “voy a trasplantarme, me decidí a hacerlo, porque antes no quería. Tenía mis cosas y bueno, mi pareja me respondió al tiro, bueno, “yo soy tu donante”. Yo le digo, ¿pero por qué así tan rápido? Me dice, porque yo soy donante del año 89 y como yo te conozco a ti, vivimos juntos tanto tiempo, yo quiero donarte a ti en vida”.
Tras una serie de trámites y exámenes, especialmente relacionados con la compatibilidad, además de el transcurso de una pandemia entre medio, finalmente los equipos de Procura y Trasplante, junto a los especialistas de Urología, lograron concretar el trasplante durante el año 2022, operación que resultó un completo éxito.
Salud tras la donación
El impacto positivo que ha tenido este trasplante en la vida de ambos protagonistas es innegable. La generosidad de Enzo al donar un riñón a Danilo permitió que recupere su calidad de vida y mire hacia el futuro con optimismo. Por otro lado, Enzo compartió cómo esta experiencia fortaleció su espíritu y le generó una sensación de satisfacción.
“Yo creo que como donante, uno tiene que dar por la persona que sea. Si uno puede, yo creo uno debiese entregar un órgano si puedes vivir sin uno de ellos. En relación a mi salud luego de la donación, yo estoy viviendo una vida totalmente normal, no tengo restricciones. De hecho, tomo más agua que antes, por lo mismo, porque creo que también yo aprendí con los funcionarios del hospital que hay que beber agua para que el riñón funcione correctamente. Y me acostumbré a eso, me acostumbré a una vida de comida sin excesos también”, expresó el donante vivo.
Atención especializada
Los equipos especializados del Hospital Carlos van Buren desempeñaron un papel esencial en esta historia, con la entrega de atención especializada y cuidados excepcionales tanto antes como después de la cirugía. El caso de Enzo y Danilo evidencia el impacto positivo que puede tener el acto desinteresado de donar un órgano. Su historia invita a reflexionar sobre la importancia de la empatía, la solidaridad y el amor al prójimo, valores que, sin duda, enriquecen nuestra sociedad.